El cambio más grande que hicimos a Poubel

Gstaad Guy no es solo un personaje viral. Es uno de los pocos creadores que ha convertido su humor en una marca con alma.

Y no cualquier marca.

Poubel es una de las más creativas que he analizado últimamente.

Pulseras personalizables con “Charms”: pequeños colgantes que puedes elegir y combinar como quieras para crear tu propia pulsera.

Pero había algo que chirriaba cuando entrabas en su tienda online.

La oferta de valor del producto es la personalización, crear tu propia pieza combinando todos los charms que tú quieras.

Pero en la web… eso no se siente igual.

Así que me puse a trabajar en una idea muy clara:

Una experiencia donde puedas ir viendo cómo queda tu pulsera mientras la vas creando.

Primero eliges la cadena. Después vas añadiendo charms uno a uno. Y al momento ves el resultado final, como si ya la tuvieras en la muñeca.

Esto no solo hace la experiencia más divertida. También hace que vendas más.

Este cambio te hace imaginar que ya tienes la pulsera en tus manos, y convierte la experiencia de compra en algo mucho más fluido.

Una experiencia como esta puede aumentar la tasa de conversión fácilmente un 1% o más. Y cuando tienes tráfico, ese 1% son muchos miles de euros al mes.

Es una técnica simple, pero bien aplicada, puede marcar una diferencia brutal.

Un abrazo,
Raul